CLASICOS DEL VIDEOCLUB

joseviruete - 21/07/02

Ahora que los cines se llenan hasta reventar y que el videoclub no es más un lugar donde rescatar lo que nos perdimos en la multisala del centro comercial, es el momento de recordar las películas con las que muchos crecimos. Películas que no íbamos a ver al cine, sino que alquilábamos en videoclub. Estas cintas hacían más dinero allí que en la gran pantalla (las que se estrenaban), y el boca a boca entre los chavales de la época las hacían las más solicitadas.

Como podéis ver, abundan los bodrios. Lo mismito que ahora, pero sin efectos especiales por ordenador ni brutales campañas publicitarias. Es una selección personal, por supuesto pero es que... esta es mi web, caballeros.

Sin más preámbulos: galería de los horrores.

Invasion USA

En realidad, prácticamente toda la filmografía 80s de Chuck Norris podría incluirse en esta lista, porque el tío no se comía un colin en los cines (andaba escaso de carisma), pero arrasaba en el videoclub. Si elijo esta es por ser un favorito personal debido a su demencial argumento: un grupo de terroristas, financiados por los rusos deciden invadir el país. Los terroristas son muy malos y hasta ponen bombas en autobuses infantiles. Menos mal que está Chuck y sus coleguillas para defender el mundo libre. Mira que nos avisó el tío que los moros eran muy malos, y nada, ni caso. Lo único que le falta para ser perfecta es la moto de Delta Force. De rabiosa actualidad.

 

Y si no, nos enfadamos

Estos también triunfaron en el cine, y durante mucho tiempo fueron los héroes de Europa entera, de la misma que ahora vive una celebración. A pesar de su clásico reparto de hostias y de gracias, me quedo con la magistral escena del coro: "pom, pom pom pon"... ¿Y qué me decis de la pelea con los globos? La película se rodó en España y la excusa argumetnal era un minibólido que regalaban al vencedor de una competición. Imprescindible.

Kickboxer

Una de las causantes de la edad dorada que vivieron los gimnasios en nuestro país. Nuestro héroe, Van Damme, debe vengar a su hermano, lisiado por el malvado Ton Po. Como siempre, lo conseguirá gracias a unos extensos entrenamientos, que permiten que alguien que no ha hecho artes marciales en su vida consiga, en pocos meses, ponerse a la altura de aquellos que llevan toda una vida practicándolas. Y es que amigos, el espíritu humano todo lo puede. No faltan los típicos caretos de Van Damme y las señas de identidad de este actor: espatarrarse y gritar "¡Noooooooo!" en algún momento de la película.

Masters del Universo

Largamente esperada por los fans de los dibujos y los muñecos, Masters del Universo supuso una decepción para los chavales de la época como Street Fighter lo fue para los de esta (y para los de la anterior, que estaban enganchados todos al videojuego). Dolph Lundgen, el mítico Ivan Drago de Rocky IV (mote por el que era conocido Javi Viru en el instituo, debido a sus rasgos centroeuropeos y estatura), era un pasable He-Man, y todo lo demás una castaña. Con todo, es divertidilla y tiene sus momentos. A destacar los monstruos gualtrapas y el Skeletor más cutre que se podía haber conseguido.

 

Starfighter, la aventura comienza

La sombra de Star Wars es muy larga, y a mucha gente le impide apreciar esta películita tan chula. Repasemos: un teenager americano bate el record de una recreativa y es elegido para pilotar un caza en una guerra interestelar. Lógicamente, el caza se maneja igual que la maquina de marcianos. A mí que me digan donde firmo, porque de crío me parecía una pasada. Había un doble robot del crío y un lagarto que le ayudaba. Pues mola. Los efectos digitales siguen teniendo su gracia y te la puedes volver a ver 14 veces por los canales digitales sin ningún problema.

 

Critters

¿Qué os voy a contar de esta? La moda de Gremlins (otra peli redonda) trajo a los Munchies, a los Ghoulies y a los Critters. Estos bichejos venidos del espacio eran muy cabrones para ser tan pequeños (como Sin-Chan), y tenían más hambre que Carpanta. La idea de los bichos es cojonuda: se convierten en bolas y tiran dardos adormecedores, y la de los caza-critters, también. Y en la segunda se juntaban todos para hacer una bola gorda. Las demás secuelas no molan nada de nada, pero las dos primeras eran la comidilla en clase de gimnasia.

 

Aterriza como puedas II

La primera molaba, pero la segunda aún más. Principalmente porque era más moderna y el avión iba por el espacio, con lo cual había sitio para más efectos especiales. Nuestro querido Richard Hays repite papel, con la misma cara de pasmado de siempre, cara que tan buenos resultados le dió en la serie Starman. Y encima sale William Shatner. ¿Qué más queréis, calamares?

 

Commando

Otra pedazo de serie B. Schwazenburger contra los malos en una orgía de justicia, explosiones y cabezas cortadas. Todavía no era la super-estrella que sería a raíz de Desafío total, ya que era la época de máximo auge de Stallone, pero se le tenía muy en cuenta a la hora de alquilar las pelis. Y además salía Alyssa Milano de cría. No sabemos si estaba inspirada en el videojuego del mismo nombre, pero el desarrollo no se diferencia demasiado: matar, matar y matar. Que grande es el cine.

 

Howard El Pato

El gran descalabro de George Lucas. En lo económico, claro, porque artísticamente hablando este pastiche es claramenete superior a El Episodio fantasma ese. Basado un cómic de la Marvel que no se había leído ni Dios, tiene todo lo que una persona cabal puede pedir a una peli: Lea Thompson, monstruos del espacio y un pato que habla. Uno de los momentos más escabrosos del filme es cuando se insinúa una posible relacción zoofílica entre la Thompson y nuestro Howie. Y los padres se la ponían a los niños.

Jaimito contra todos

Aquí pasa lo mismo que con Chuck Norris, citamos una aunque todas merecen estar en esta insigne lista. Las películas de Alvaro Vitali tenían la virtud de reunir a toda la familia para verlas (al menos a los varones). El humor inmortal de culos y tetas de Jaimito aún nos hace reir al recordar sus divertidas peripecias, normalmente cuando uno se aproxima al coma etílico. ¿Quién no ha pensado en la broma de "Chicago de noche" al leer alguna referencia a dicha ciudad? No digo más: aquí se encuentran los cimientos con los que se ha contruido la cultura occidental.

 

La lista podría seguir y seguir, con todos esos títulos que ustedes seguro recuerdan: Las de Pajares & Esteso, las de Ninjas, todas las de la Cannon, las de Zombies, las de Caníbales, las de Molly Ringwald y todas las de adolescentes salidorros... Pues eso, elaboren sus propias listas y revisítenlas con los amigotes. O mejor no, que a más de uno le puede dar algo pensando "¿y esto me gustaba a mí de pequeño?".

Buenas noches. O como decían en Masters del Universo, Buen destino

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